Alrededor del mundo vemos más empresas elaborando prototipos para lo que se considera es el tipo de construcción del futuro: las casas impresas en 3D. Lo interesante de estas pruebas de concepto es que cada una trae su propia peculiaridad o método a la fabricación de estas estructuras. En el caso de este artículo es la tierra la que despierta el interés, ya que fue el material usado en el 95% de la materia prima.
Características
Este proyecto fue llevado a cabo por Mario Cucinella en colaboración con la empresa italiana WASP, líder en impresión 3D en Europa. Las dimensiones de estos edificios son de 60 m2, con 49m2 útiles en la vivienda. Adentro cuentan con una sala de estar, un dormitorio y un baño, con muebles y estanterías también impresas en 3D e integradas a la estructura general de la construcción. La forma es circular y de un diseño particularmente rústico, evocando a hogares del pasado pero que han sido construidos con los métodos del futuro. Particularmente se pensó en las casas semi-subterráneas construidas a base de tierra en Matmata, al sur de Túnez.
Motivación
Ahora, ¿por qué imprimir casas 3D a base de tierra? Tal vez no sea el primer material que se le venga a uno a la mente al pensar en impresión 3D, pero resulta que se alinea perfecto con muchos de los beneficios de esta tecnología. Por ejemplo, la huella de carbono de este proyecto fue bajísima, ya que la tierra y las fibras de arroz que se usaron (sin contar el 5% de coagulante) vinieron del mismo entorno. Y debido al material y la forma de las construcciones, son ideales para abrigar, aislar y permitir una correcta ventilación. Este paso hacia la sostenibilidad es algo que ha caracterizado a la impresión 3D y que este proyecto ha buscado potenciar.
Modelo final de las viviendas de tierra
Aún no podemos afirmar la escalabilidad de este proyecto en un futuro cercano, ya que ni los costos ni la optimización de estos fueron factores que se consideraron en estas construcciones. Pero, de igual manera, la idea de apostar por construcciones eco-sostenibles y que no dependan de nada más que del sitio que las rodea es algo que debería ser considerado y resuelto para alcanzar más rápido una reducción considerable de nuestra huella de carbono en el mundo.